domingo, 9 de junio de 2013

Capitulo 15


Cuando los chicos se acercaron a ellas, Val no podía dejar de mirar a uno de ellos. Era más alto que ella, moreno y tenía unos ojos verdes brillantes y una sonrisa, que la hipnotizaron desde el primer momento.

- ¡Hola! Me llamo Cristian ¿Y tú? –entonces Miriam le dio un codazo a su amiga que le hizo salir de su nube.

- Perdona. Yo soy Valeria. Encantada –Y le dio dos besos al muchacho, que sonreía al sentirla tan cerca. –Y ella es mi amiga Miriam.

- Encantado. Él es mi amigo Pablo. El resto del grupo es más vergonzoso y no se ha querido acercar –comentó con una tímida sonrisa.

Mirando la guía que Valeria llevaba entre las manos, dijo: -Veo que todos viajamos al mismo sitio.

- ¿También vais a New York? –La sonrisa de Val lo decía todo- Podíamos quedar allí algún día todos ¿Qué os parece? ¡Siempre está bien encontrarte españoles en la otra parte del mundo!

- ¡Eso estaría genial! –Cristian mirando su reloj, añadió: Creo que ya es hora de embarcar. Déjame que te ayude con la maleta y así concretamos de camino.

- ¿Pero que llevas ahí dentro, para que esto pese tanto?

- ¡A mi marido! Es que así me ahorraba el pagar su billete – Contestó Valeria haciendo reír a todo el grupo.

Durante el vuelo Val y Miriam no habían parado de hablar con el grupo de chicos que se les habían acercado en el aeropuerto. Todos iban a pasar allí las navidades y casualmente también volvían en el mismo vuelo. Habían hecho planes de hacer turismo todos juntos, ya que se habían caído bien desde el principio. También pasarían juntos la fiesta de Nochevieja. Ellos no era la primera vez que visitaban la ciudad, así que les servirían de guías.

Al separarse en el aeropuerto de NY para dirigirse a sus respectivos hoteles se dieron los teléfonos y la dirección de sus alojamientos.

- Esta ciudad es impresionante y el hotel una pasada –Comentó Val ya en la habitación.

- ¿Y cristian? –dijo Miriam con una risita.

- ¿Qué pasa con Cristian?

- Venga, Val… ¡No me digas que no estabas tonteando con él!

- ¡Pues igual que hacías tu con Pablo!
Ambas empezaron a reír y a comentar el viaje, y a sus nuevos amigos. Quizás, con el tiempo, llegaran a convertirse en una parte importante de sus vidas. O no…


Los días previos a la Nochevieja los pasaron disfrutando de la ciudad, de su comida basura, de los rascacielos, de sus calles, sus teatros, sus noches….

- ¡Val, por favor! Basta de fotos. ¡Sabes que las odio!

- Y tú ya sabes que la fotografía es mi vida y mi pasión. Así que no me toques la cámara que nos conocemos…

- Desde luego… no hay quien pueda contigo. –Soltó Miriam con un resoplido.

- Venga, las últimas. Pablo, ponte tú con Miriam.

- Suelta la cámara y ponte tú con Cristian. -Se rió Miriam.

- ¡Hay que ver como eres! –Sonrió Val mientras posaba con Cristian.

De vuelta al hotel Valeria empezó a subir fotos a su perfil de Facebook.

- ¡Vamos a dar envidia y que se jodan los de mi pueblo!

- Jajaja! Ya verás como les va a fastidiar estas fotos a Raquel y las apio-friends.

 
Entre risas, paseos y fotografías, por fin llegó el día esperado: Nochevieja. El grupo se dirigía hacia Times Square a celebrar el año nuevo. Allí se encontraron ante una plaza abarrotada de personas de todas las nacionalidades. Muchas de ellas, incluso llevaban guardando su sitio desde el día anterior. Apenas podían moverse. Los chicos pusieron a Mirian y Val entre ellos, para protegerlas de codazos y pisotones.
Val no podía apartar la vista de la Torre de One Times Square, y mientras miraba la cuenta atrás, y pedía su deseo de año nuevo. Cuando el reloj llegó a cero, Cristian, que también había pedido su deseo, se giró sin pensárselo y besó a Valeria. Pablo, al ver a su amigo, agarró a Miriam que estaba felicitando el año nuevo al resto, e hizo lo mismo.

Ambas muchachas al sentirse en los brazos de otros hombres recordaron a los que habían dejado atrás y no respondieron como Pablo y Cristian esperaban.

- Estas caen esta noche como que me llamo Cristian. -Dijo felicitando a su amigo.

- Yo no lo tengo tan claro. No he visto a Miriam muy receptiva.
 

- ¿Qué acabamos de hacer? – Preguntó Miriam abrazando a Val.

- Nosotras nada, aunque tengo que confesarte que no me ha molestado el beso de Cristian. Pero vamos a disfrutar del momento. Total, no los vamos volver a ver…

Como pudieron salieron de entre el gentío para dirigirse al lugar donde les espera la fiesta. Una vez allí, no pararon de bailar y bromear, y como no podía ser de otra manera, Valeria no paró de hacer fotos.
Joder, ¡Que cantidad de manos tienen estos dos! Por no hablar de sus amigos… -Dijo Miriam un poco molesta.

- ¡Que me vas a contar! Sólo tienes que ponerles un límite y disfrutar del momento. ¡Déjate llevar!

- Bueno, si todo lo hace igual que baila…

- Jajajaja! Eso es Miriam. ¡Que por una vez no va a pasar nada! Ya veremos que hacemos a la vuelta.

 

2 comentarios:

  1. Uuuummm cada día me desconciertan más estas dos!

    No entiendo mucho esa actitud que han tomado de una forma tan rápida, olvidándose de lo que tienen en España.

    Ganas de leer como sigue esto que esta en lo mejor :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cada cosa que hacemos, la hacemos por algo... ellas, también tendrán sus motivos, no? ;)
      Quizás en el siguiente capitulo se sepa porque lo hicieron...
      Aquí dejo la intriga... jajaja

      Eliminar